12 cosas que ver en Barcelona
Todo lo que necesitas saber
Índice de contenido
➭ 01. Palau de la Música Catalana
➭ 02. Recinto Modernista Sant Pua
➭ 03. Cárcel Modelo
➭ 04. Casa Vicens
➭ 05. Palau Güell
➭ 06. Casa Batlló
➭ 07. Casa Milá. La Pedrera
➭ 08. La Sagrada Familia y Park Güell
➭ 09. Basílica de Santa María del Mar
➭ 10. Torre Glòries
➭ 11. Parque de la Ciudadela
➭ 12. Gastronomía: Calçots, Fideua
01. Palau de la Música Catalana

A tan solo 5 minutos de la céntrica Plaza de Cataluña, nos encontramos con el primer lugar que te propongo, el Palau de la Música Catalana. Fue construido entre 1905 y 1908 por el arquitecto modernista Lluís Domènech i Montaner como sede del Orfeó Català. El edificio está situado en el barrio de Sant Pere, una de las zonas más bonitas que ver de Barcelona.
Tiene el privilegio de ser la única sala de conciertos declarada Patrimonio Mundial por la UNESCO, toda una perla arquitectónica del Modernismo catalán. Su monumental fachada no pasa desapercibida a todos aquellos que pasan por delante. Te aconsejo pararte delante, dar marcha atrás al reloj e imaginarte la gente entrando con sus mejores galas y en carruaje hasta este Palau de la Música Catalana.

Si el exterior es bonito el interior lo es aún más, a mí me flipó. Sigue utilizándose para conciertos y recitales, así que si hay un espectáculo al que quieras ir y da la casualidad que tocan allí, merece la pena escucharlo en este Palau.
Abren todos los días de 9:00 a 15:30, la duración de la visita es de 50 minutos. Van con horas programadas y las hay en diferentes idiomas. Yo recomiendo hacerla guiada, porque igualmente al finalizar la visita te puedes quedar más tiempo para sacar las fotos que quieras.
La visita guiada son 20€, con audioguía 18€ y la entrada combinada con el Hospital de Sant Pau son 24€. De todos modos si no quieres hacer la visita, te recomiendo que por lo menos entres y veas el hall de entrada y te des una vuelta por la cafetería.


Otro lugar imprescindible qué ver en Barcelona es el Recinto Modernista Sant Pau, que forma parte de lo que era el Hospital de la Santa Creu i Sant Pau. Fue declarado Patrimonio Mundial por la UNESCO en 1997 por su singularidad y belleza artística. El Recinto Modernista está configurado como un conjunto arquitectónico integrado por 12 pabellones rodeados de zonas verdes y conectados entre sí gracias a un kilómetro de galerías subterráneas.
El arquitecto es el mismo que el del Palau de la Música Catalana, si vas a visitar los dos monumentos te aconsejo sacar la combinada puesto que sale mucho mejor de precio.
Nosotros hicimos la visita libre, puedes andar tranquilamente por todo el complejo, tienen paneles informativos con toda la información y también tienes la opción de coger un mapa a la entrada. Te llevará como una hora recorrer el espacio tranquilamente. No todos los pabellones están abiertos, de hecho, solo hay uno totalmente restaurado y otro que puedes ver como lo están restaurando.
Funcionó como hospital durante años y claro según iban cambiando las necesidades de la vida pues necesitaban compartimentar y hacer más pisos en estos pabellones tan amplios para poder albergar la mayor cantidad de gente posible.
Abren de lunes a domingo de 9.30 a 18.30 de abril a octubre y de 9.30 a 17:00 de noviembre a marzo. La entrada con visita libre son 16€ y guiada son 20€.

Una visita que creo que sin duda es totalmente diferente es visitar la antigua Cárcel Modelo de Barcelona. Actualmente lo usan como centro cultural y también ha servido como escenario para muchas películas y series.
Hacen visitas guiadas, pero hay que reservarlas con meses de antelación. Nosotros pudimos ver un poco del interior, puesto que fuimos cuando ya estaban cerrando, y ver su exterior. Está situada muy cerquita de la estación de tren de Sants, por lo que si vas en tren no tienes excusa para no acercarte.
Puedes ir y visitarla por tu cuenta los fines de semana, los viernes de 16:00 a 18:00, los sábados de 10:00 a 14:00 y de 16:00 a 18:00 y los domingos de 10:00 a 14:00.

De las muchas obras que Gaudí tiene en Barcelona creo que la Casa Vicens puede ser una de las más desconocidas y que tienes que ver en Barcelona.
Esta fue la primera casa que diseñó, fue construida entre 1883 y 1885 como casa de veraneo de la familia Vicens. En ella despliega su inigualable talento, fue declarada Patrimonio Mundial por la UNESCO en 2005.
La entrada general son 18€ y también hay entrada con visita guiada que son 21€, las visitas guiadas se hacen en grupos de máximo 12 personas.
Nosotros hicimos la visita guiada y la verdad que la experiencia fue muy grata, la guía fue muy buena, te ayuda a apreciar cada detalle de la casa y como se ha ido transformando el espacio a través de los años.
Abren de noviembre a marzo de 9:30 a 18:00 y de abril a octubre de 9:30 a 20:00.

Muy cerquita de la Rambla, encontramos el primer gran encargo que le hicieron a Gaudí de parte de una familia que seguro su nombre te sonará, la familia Güell, apellido muy familiar porque Eusebi Güell fue también quien encargó hacer a Gaudí el famoso Park Güell, que si no lo has visitado también es un punto destacado que ver en Barcelona.
Por fuera a lo mejor a priori no llama tanto la atención como otros edificios modernistas de Barcelona, pero para mi gusto, el interior es lo realmente diferenciador de este palacio. Hicimos la visita por libre con una audioguía que nos iba contando la historia de este palacio y como se disponía la vida en el.
La entrada general cuesta 12€. El horario de verano va del 1 de abril al 30 de septiembre y abren de 10:00 a 20:00 y en invierno va del 1 de octubre al 31 de marzo y abren de 10:00 a 17.30.

Después de la Sagrada Familia, creo que la Casa Batlló es el segundo edificio de Gaudí más visitado, siempre está lleno de gente su acceso principal y es que no es para menos, puesto que para mí es uno de los edificios modernistas más bellos que ver en Barcelona.
Nosotros hicimos la visita con audioguía, y la verdad que viene muy bien para conocer de primera mano el funcionamiento de la casa. Además la tablet que te dan es interactiva y te ponen parte del mobiliario que había en la época.
Abren todos los días del año de 9:00 a 22:00. Tienen varios tipos de entrada y os recomiendo coger la más completa puesto que hay una zona de la casa que conserva el mobiliario original de la época, y vale la pena puesto que de esta manera lo ves físicamente como era y lo mejor es que esta zona no está tan masificada como el resto de la casa.
Lo mejor es ver los precios en su página web, y decirte que para residentes en España tienen 2×1. Te recomiendo comprar la entrada con antelación puesto que hay mucha demanda y es uno de los lugares más visitados de Barcelona, y si es fin de semana más aún. Si puedes ir un día entre semana y a primera hora del día no encontrarás tanta gente, pero si no es posible te recomiendo tener mucha paciencia.

Otra de las casas más populares es la Casa Milá conocida popularmente como la Pedrera. Se le puso el sobrenombre de “La Pedrera” por su aspecto exterior, parecida a una cantera a cielo abierto.
Los encargados de pedir este edificio a Antoni Gaudí fueron el matrimonio Pere Milá y Roser Segimon. El edificio fue construido entre 1906 y 1912, la familia Milá ocupó el piso principal y alquiló el resto para viviendas.
La Casa Milà es el edificio civil más emblemático de Antoni Gaudí, tanto por sus innovaciones constructivas y funcionales como por las soluciones ornamentales y decorativas. Supuso la ruptura con los esquemas de su tiempo, todo un gran exponente del modernismo catalán.

Al igual que en Casa Batlló existen varios tipos de entradas con diferentes precios, como siempre te aconsejo coger la más completa.
El horario en temporada de invierno es de lunes a domingo y festivos de 9:00 a 18:30, con sesiones de visita nocturna de 19:00 a 23:00. En verano es de lunes a domingo y festivos de 9:00 a 20:30, y las sesiones de visita nocturna de 21:00 a 23:00.

Un clásico que no puede faltar es sin duda visitar tanto la Sagrada Familia como el Park Güell. Como en los anteriores monumentos hay también diferentes tipos de entradas, algunas de ellas que combinan ambos lugares, pero te recomiendo ver los tipos de entrada en sus páginas web oficiales.
Insistir nuevamente en que reservéis si o si por internet la entrada porque son dos visitas muy solicitadas y que suelen estar muy masificadas. Os aconsejo como siempre visitarlo un día entre semana y a ser posible a primera hora del día.

La Basílica de Santa María del Mar de Barcelona, conocida como la «Catedral del Mar» por la novela del autor Ildefonso Falcones. Esta basílica es uno de los ejemplos más perfectos de la arquitectura de estilo gótico, por armonía en sus proporciones y la serenidad que ofrece el conjunto.
En la Edad Media, los largos periodos de construcción de una iglesia, (frecuentemente más de un siglo), solían implicar cambios de estilo arquitectónico. Santa María del Mar de Barcelona es una excepción. Fue construida en sólo 55 años, de 1329 a 1384, es la única iglesia de estilo gótico catalán puro. Su estructura es de tres naves casi de la misma altura, con sobrias y altísimas columnas cada 13 metros de distancia, un espacio no superado por ninguna construcción medieval en todo el mundo.

Lo que quiero destacar de esta visita son las vistas que hay desde la azotea, puesto que se puede disfrutar de Barcelona desde una perspectiva privilegiada que ayuda a entender el entramado urbano medieval y la estructura del centro de la ciudad. Una visión de 360º que no te dejará indiferente.
No pongo horario porque no recuerdo cual era y en internet depende de donde mires te sale un horario y otro. Para subir a la torre hay que pagar, pero al final de la iglesia está la escalera para subir, he de decir que no había nadie para controlar el acceso y subimos gratis.

Otra de las mejores maneras de ver Barcelona desde todo lo alto es desde la Torre Glòries, anteriormente llamada Torre Agbar. No os voy a engañar y deciros que tiene unas vistas maravillosas, que no son malas tampoco, pero para mi gusto en relación con lo que cuesta subir y las vistas que te encuentras pues no mereció mucha la pena, pero bueno había que probar.
Otro factor que juega en contra es donde está situado, bastante lejos del centro, pero bueno es una buena forma también de conocer un barrio más. Las vistas son 360º, para mi gusto le falta algún hueco donde no tener una vista más clara de la ciudad pero claro la torre es como es.
La entrada general es de 15€ y tienen otra entrada donde incluye poder subir a las plataformas colocadas en el techo.

Un paseo muy grato para hacer en medio de la ciudad y además gratis, es pasear por el Parque de la Ciudadela.
Este gran pulmón verde es una buena alternativa para desconectar e ir a un parque no tan masificado como el Park Güell. Puedes ir paseando desde el Arco del Triunfo de Barcelona, escenario también típico de películas y series, e ir hasta la zona del estanque.
Además en este parque se encuentra el Parlamento Catalán y el Zoo de la ciudad.

Si algo bueno tiene viajar es poder degustar los sabores originales de cada sitio, es sin duda un buen plan que hacer en Barcelona.
Uno de los platos típicos de la cocina catalana son los calçots, que se pueden comer en muchos rincones de España, pero sí que es verdad que como allí no lo preparan en ningún sitio. Nosotros en concreto fuimos a “El disbarat” situado en la calle del Montseny Nº 14.
Tienen menú del día y cuando es época de comer calçots viene en el menú, aún así hay que reservar con bastante tiempo de antelación, puesto que es un lugar bastante popular, pero merece mucho la pena.
Otro plato típico son los caracoles, pero no es un plato que sea de mi devoción, pero en su lugar me pedí una fideuá y la verdad que estaba deliciosa. Fuimos a la “Taberna El Glop” en la calle Sant Lluís Nº 24. Recomiendo también reservar con tiempo puesto que es otro lugar también bastante popular y se come muy bien.
Espero que esta modesta guía de sitios que ver en Barcelona te sirva de ayuda y puedas conocer otra parte de la ciudad que a lo mejor no conocías.
Espero que esta modesta guía de sitios que ver en Barcelona te sirva de ayuda y puedas conocer otra parte de la ciudad que a lo mejor no conocías.