Cómo visitar Petra
Todo lo que necesitas saber
Si tienes en mente visitar Petra estás en el sitio adecuado, te cuento cómo visitar Petra. Tendrás toda la información necesaria para visitar este espectacular lugar. No se si tienes pensado coger un paquete de viajes o si prefieres visitarlo por tu cuenta, aquí te daré toda las respuestas. Además te informaré de precios, horarios, cual es la mejor época para visitar, etc.
Después de mucho tiempo deseando hacer este viaje, por fin llegó el día que pude ver Petra por primera vez, las expectativas estaban muy altas y he de confesar que las cumplió con creces. Pocos lugares hay tan impresionantes como esta joya jordana, que fue declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1985 y esta considerada como una de las Siete Maravillas del Mundo Moderno.
Todos, incluido yo, vamos con el foco de ir a ver la famosa fachada de “El Tesoro”, pero Petra no solo es esa fachada, hay mucho más que ver. Nosotros tuvimos un día entero para visitar todo el recinto. Nos dio tiempo de ver todo lo que queríamos pero si quieres explorar más zonas te recomiendo mínimo pasar dos días allí o por lo menos tener un día entero. Te cuento esto porque hay paquetes de viajes que te llevan solo la mitad del día y me parece muy poco.
Índice de contenido
➭ Introducción a Petra:
➭ Consejos para tu visita a Petra:
➭ ¿Merece la pena alojarse en Wadi Musa?:
➭ Cómo visitar Petra, ¿visita guiada o libre?:
➭ Qué ver en Petra:
→ Bloques Djinn
→ El Siq
→ «El Tesoro» Al Khazna
→ Avenida de las Fachadas
→ El teatro romano
→ La Calle Columnata
→ El Gran Templo
→ Qasr al-Bint
→ «El Monasterio» Ad Deir
→ Tumbas Reales
➭ Horarios y precios de Petra:
➭ Cuál es la mejor época:
➭ ¿Comer dentro o fuera de Petra?:
Introducción a Petra:
No se sabe con exactitud cuando se construyó Petra, pero si que la ciudad empezó a prosperar cuando fue capital del Imperio Nabateo el siglo I a.C.. Más tarde terminaría anexionada al Imperio Romano, continuo prosperando pero un gran terremoto destruyó gran parte de la ciudad el 363 d.C..
En este punto empezó el declive de la ciudad, que pasó de ser un punto importante de comercio de incienso, mirra y especias, a quedar en el olvido debido al cambio de las rutas comerciales. Finalmente Petra quedó prácticamente olvidada excepto para los beduinos de la zona.
A lo largo de muchos siglos Petra quedó en el olvido hasta que en 1812 el explorador suizo Johannes Burckhardt se vistió como un árabe y convenció a un beduino para lo le llevara a la ciudad perdida de Petra. A partir de aquí la ciudad fue conocida en occidente y empezó a atraer visitantes de todo el mundo.
Contrata un guía, Petra es muy grande y tiene infinidad de caminos. Nosotros teníamos guía, muy bueno por cierto, puesto que cogimos un paquete completo en nuestro viaje a Jordania. Si vas a ir por libre te recomiendo contratar un guía a través de una agencia de confianza. Se que ha habido gente que contrata algún guía de allí y fue todo un fiasco.
Lo mejor es acudir a primera hora del día, tanto para verlo con la menor cantidad de gente posible, como para evitar las alta temperaturas que se pueden llegar a registrar. Nosotros fuimos en el mes de diciembre y la chaqueta hubo momentos que nos sobró.
Llevad crema solar, gafas de sol y gorra, a pesar de ir en pleno mes de diciembre el sol pegaba con fuerza.
Es muy importante llevar agua, entre un puesto que puedas comprar agua y otro hay mucha distancia. Puedes llevar también si quieres la comida o algún tentempié para pasar el día.
Algo que no puede faltar es llevar un calzado cómodo, Petra es muy extenso y el suelo sobre todo es de tierra, hay muy pocas partes empedradas.
Ante todo respetad todo el entorno, no subáis a sitios pocos seguros por sacar una magnífica foto, no vale la pena. Hay que practicar un turismo responsable, y parte de esa responsabilidad está en no montar en los burros, camellos o caballos que tienen allí. No están en las mejores condiciones y los hacen pasar por sitios muy complicados, los pobres son utilizan como una atracción turística.
Tampoco compréis nada a los niños que hay vendiendo souvenirs, los tienen desde pequeños allí trabajando y aprovechando de que dan pena para que algún incauto compre algo por que le de pena el niño, al final sin querer fomentamos a que el niño siga allí trabajando.
Wadi Musa es el nombre del pueblo que está a la entrada de Petra. Lo mejor es pillar un alojamiento lo más cerca posible del centro de visitantes. Nosotros dentro del paquete cogimos un hotel económico y que no estaba mal, te dejo más información AQUÍ.
Nuestro Hotel no estaba muy alejado de la entrada a la ciudad de Petra, aunque hay hoteles que están justo al lado del centro de visitantes como el Mövenpick Petra y Petra Moon. La ventaja de estar cerca es que una vez que sales del recinto puedes ir andando hasta el hotel y volver si vas a ir a ver Petra By Night, aunque si vas con todo contratado al final te devuelven al hotel.
Se puede visitar Petra por libre, pero hay que tener en cuenta que lo que vas a encontrar es un recinto enorme con muchos caminos, y a no ser que te hayas empollado muchísimo que ver, al llegar allí te vas a encontrar con no saber por donde tirar.
Por eso creo que si es tu primera vez lo mejor es realizar un tour guiado por Petra, además de explicarte los secretos que esconde este increíble lugar, te servirá para que te ayude a orientarte y así en el tiempo libre poder investigar sin miedo a perderte. Encontraras «guías» en la entrada de Petra que se ofrecerán, pero la mayoría no son nada fiables.
Te cuento exactamente el recorrido según lo hice. Como indiqué al principio hay muchos caminos una vez dentro, ninguno mejor que otro, solo espero poder ayudarte a conocer un poco esta ciudad tan mágica si decides visitarla por tu cuenta.
Lo primero que te encuentras es con el Centro de visitantes. El autobús nos dejo en el aparcamiento reservado para ellos, pero hay otro aparcamiento reservado para turismos, más abajo te dejo la información de precios y horarios.
En esta zona hay tiendas y algún restaurante para comer o comprar algo de comida, dentro de Petra hay pocas opciones, pero hay alguna, luego te especifico más adelante. También cuenta con baños, si necesitas ir al baño aprovecha porque están limpios y dentro se masifican más.
La primera parte del camino es atravesar el valle conocido como Bab as-Siq. A lo largo del camino te encontrarás bloques de piedra conocidos como bloques Djinn y hay alrededor de unos veintiséis bloques Djinn que datan del siglo I d.C. Aunque se desconoce a ciencia cierta su función, lo más seguro es que se utilizaran como tumbas. Uno de los apodos por la que se la conocía a Petra era como “la ciudad de los muertos”, y es que semejante recibimiento no da para menos.
Para atravesar esta parte hay caballos “gratuitos”, luego te piden que les des una propina. Te llevan hasta la entrada del Siq y también hay carritos de golf que te llevan incluso hasta la fachada de “El Tesoro”. Si no tienes problemas de movilidad no te aconsejo coger nada de esto, puesto que el camino no es largo y sinceramente mola mucho más ir descubriendo a cada paso la ciudad.
Terminada la primera parte del camino llegamos hasta el Siq, una garganta estrecha que conduce a los visitantes hasta Petra. El Siq es el resultado de la erosión natural de la montaña y tiene 1 km de longitud. En su día había un arco triunfal que servía de entrada a los visitantes. Dos canales de agua discurren por ambos lados de la garganta. Además el Siq proporciona una entrada impresionante a Petra, y conserva muchas reliquias del pasado, incluyendo el camino pavimentado.
Aún hoy día han quedado algunas de las tallas que hicieron en este desfiladero.
El Siq abre paso a la fachada más impresionante de Petra, «El Tesoro» o Al Khazna. Tiene casi 40 metros de altura y decoraciones elaboradas con capiteles y frisos, figuras y cornisas. El Tesoro está coronado por una urna funeraria, y la leyenda local cuenta que esta urna estaba llena con el tesoro de un faraón. Su función original todavía sigue siendo un misterio, puesto que no hay escritos.
Hacer una foto sin que salga nadie es una tarea casi imposible, pero si coges el ángulo correcto puedes salir sin nadie al lado. Otra opción es esperar a última hora, por la mañana esta mucho más concurrido y al final del día hay menos gente en esta zona.
Allí hay gente local con camellos para que te hagas la foto subida a un camello, e incluso si pagas te llevan a un mirador muy poco seguro y si te ven cara de novato te intentarán cobrar dos veces. Nos aconsejaron no hacerlo porque está prohibido y fomentas que la gente de local se aproveche del turismo. Nosotros no lo hicimos, la foto la abras visto mil veces en instagram, ya queda en tus manos si quieres hacerte la foto allí o no.
Situada un poco más adelante del tesoro y adyacente al desfiladero, llena de puestecitos, nos encontramos con la avenida de las fachadas. Este es el nombre que se le da a la hilera de tumbas monumentales nabateas talladas en la ladera sur del desfiladero. Justo en esta zona hay unos baños públicos. Aquí puedes escoger diferentes caminos, uno de ellos te lleva hasta el lugar de sacrificios, que esta en lo alto de la montaña y es una gran caminata. Otro camino es ir dirección hacia las tumbas reales, pero te aconsejo ir por el camino principal y seguir adelante hasta el siguiente punto.
Excavado en la ladera de la montaña el teatro consta de tres cinturones de asientos separados por pasillos. Tiene siete escaleras que ascienden al auditorio y pueden albergar 4.000 espectadores. Los romanos reconstruyeron el muro trasero del escenario. Este es el único teatro en el mundo tallado directamente de la roca.
Esta calle es una creación original de los nabateos y fue posteriormente restaurada en el periodo de ocupación romana. Sería una de las calles principales comerciales en la antigua Petra.
Era el templo más importantes de la ciudad, dedicado a Dushara. El monumento es prácticamente cuadrado, está colocado sobre un podio y todavía hoy mide 23 metros de altura. Al templo lo preceden 25 escalones de mármol. Data de la primera mitad del siglo I d.C.
Para ir hasta la parte más alejada de la entrada de Petra hay que subir unos 750 escalones, si estas en buena forma puedes tardar en subir unos 30 minutos, de todos modos puedes hacer varios altos en el camino, pero te aconsejo sin duda llegar hasta el final del camino y ver “El Monasterio”.
El Ad Deir o el Monasterio es uno de los monumentos más grandes de Petra, con 47 metros de ancho y 48 metros de alto. En el interior hay bancadas a ambos lados y un altar sobre la pared posterior. Este espacio se usaba como un recinto para encuentros de órdenes religiosas. Data del siglo II d.C., durante el reinado del rey Rabel II. Posteriormente, el vestíbulo se reutilizo como capilla cristiana y se grabaron cruces en la pared posterior, y así es como el monumento tomó su nombre actual.
Justo frente a la fachada del monasterio hay una cafetería y varios puntos donde sacar unas fotos estupendas, los puntos además están perfectamente señalizados.
Desde este punto ya solo queda volver sobre nuestros paso, aprovechamos la vuelta para parar en la zona de restaurantes y comer, te lo detallo más abajo. Para hacer el camino de vuelta fuimos por el lado donde están las tumbas reales, de camino hay un mosaico de una antigua iglesia bizantina.
Es el nombre que se usa para llamar a este grupo de tumbas que están unas junto a las otras, ubicadas en la parte derecha del sendero principal, hacia el final, en la zona central de la ciudad. Algunas de ellas son:
Tumba de la Urna.
Su nombre vine del recipiente que corona su estructura, probablemente se construyó alrededor del 70 d.C.
Tumba Corintia.
La parte superior de esta tumba es parecía al tesoro, pero está muy erosionada.
Monumento del Palacio.
Tiene una fachada impresionante de cinco alturas. En la parte trasera tiene un dique y una reserva de agua, ya que hay un drenaje que conduce el agua de lluvia a una balsa al norte de su base. Este monumento probablemente se usó como salón de banquetes o para ceremonias funerarias.
Desde aquí ya volvimos a la parte de El Tesoro y solo quedaba atravesar el Siq por última vez para despedirse de Petra.
Una vez finalices tu visita puedes visitar el Museo de Petra que está justo al lado del centro de visitantes, la entrada es gratuita, no hay mucho que ver pero alguno de los objetos que encontraron en Petra están allí expuestos.
Existen tres opciones para comprar las entradas a la ciudad de Petra:
– A través de una agencia especializada de viajes, que se encargarán de todo.
– Comprando la Jordan Pass, la entrada de Petra viene incluida. El precio varía dependiendo de los días que quieras pasar en Petra. Un día 70 Dinares, dos días 75 Dinares y tres días 80 Dinares.
– Otra es en el mismo centro de visitantes, puesto que por la web no te deja. El precio de la entrada a Petra también varía en función de los días que vayas a visitarla:
• 50 Dinares para un día.
• 55 Dinares para dos días.
• 60 Dinares para tres días.
Tengas o no el Jordan Pass, tendrás que ir a las taquillas del centro de visitantes de Petra para que te de las entradas correspondiente. Acordaos de llevar siempre encima vuestro pasaporte porque os lo pedirán. Si vas con todo contratado, como fue nuestro caso no hará falta que te encargues de estos trámites.
Si queréis asistir al espectáculo de Petra by Night, hay que pagarlo a parte, no viene incluida dentro de nada y cuesta unos 17 Dinares. No se puede reservar con antelación, solo se puede comprar en el centro de visitantes y solo aceptan pagos en efectivo. A nosotros nuestro guía nos lo ofreció, un poco más caro pero porque venía con el trasporte incluido.
Con la entrada de Petra está incluido el paseo a caballo desde el centro de visitantes hasta el Siq. Este tramo es prácticamente llano y se recorre fácilmente, no es muy recomendable coger el caballo, por lo que te comenté de los animales y que luego aún así te pedirán que les des una propina por el paseo. Para la gente con algún tipo de problema de movilidad hay carritos eléctricos que te llevan hasta el tesoro.
El reciento de Petra abre todos los días de 6:00 a 18:00 de abril a octubre y de 6:00 a 16:00 de noviembre a marzo.
Petra by Night solo se realiza lunes, miércoles y jueves de 20:30 a 22:30.
La mejor época para visitar Petra es en primavera y otoño cuando las temperaturas son más suaves. Si vas en los meses de julio, agosto y septiembre prepárate para pasar calor, pues las temperaturas sobrepasan los 40ºC en las horas centrales del día. En invierno, las temperaturas a primera hora del día son frescas pero luego a lo largo del día son más agradables.
Mucho ojo que la época de lluvia es a finales de diciembre y enero, donde pueden caer lluvias torrenciales e incluso puede nevar.
Dentro de Petra hay dos restaurantes tipo buffet donde poder comer The Basin Restaurant (más caro) y Nabataean Tent (mas barato). En este último fue donde comimos, pero no de buffet, había bocadillos de kebab, pollo y falafel por 6 dinares y estaba rico, el buffet costaba 12 dinares. También hay algunas jaimas, en algunas zonas donde venden té, agua y algunos snacks.
Por lo que he oído la opción gastronómica de allí no es muy top y tanto los restaurantes que hay en el centro de visitantes como los que están en Wadi Musa cerca de la entrada no son muy allá. Así que para mi gusto creo que no vale la pena salir de Petra para comer.
Espero que esta pequeña guía de cómo visitar Petra te haya servido de ayuda.
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