Frontón Beti Jai

En el siglo XIX se puso muy de moda en Madrid el juego de la pelota vasca, y se llegaron a construir un total de cuatro grandes frontones en Madrid, en concreto este de Beti Jai, que significa en euskera “siempre fiesta”, fue inaugurado en 1894 y es el único que se conserva.

Conta de cuatro plantas con un graderío que tiene una capacidad para unas 4000 personas. En su época era la casa de apuestas donde la gente iba a ver el juego y apostar por su ganador.

Estuvo en funcionamiento muy pocos años. La crisis económica y luego la posterior llegada de la guerra civil hizo que el edificio quedara en desuso. Posteriormente fue reconvertido desde taller automovilístico, oficinas hasta finalmente ser abandonado y ocupado.

Todo ello hizo que la estructura original fuera conservada a pesar de las modificaciones.

Tras años de lucha el frontón fue declarado Bien de Interés Cultural en 2011, gracias sobre todo a la plataforma Salvemos el Frontón Beti jai.

Finalmente el edificio paso a manos del ayuntamiento en 2015 que se encargó de su rehabilitación y actualmente se hacen visitas guiadas. En un futuro está pensado que este espacio se use para acoger diferentes actividades culturales.